viernes, 29 de abril de 2011

Microhábitats

En ecología entendemos como microhábitat a la parte más pequeña de un ecosistema que contiene una flora y una fauna distintiva. Normalmente las condiciones de ese microhábitat difieren de las de alrededor, lo que condiciona la presencia de esas especies. Los ejemplos típicos de microhábitats suelen ser los bosque húmedos encerrados en un valle o las paredes de las cuevas, pero en algunas ocasiones esos microhábitats pueden estar limitados no sólo en el espacio sino también en el tiempo. Un ejemplo son las plantas que florecen durante una determinada época del año y que atraen a una comunidad de animales que sólo permanece allí unos pocos días.


Durante estas semanas, en muchos de los prados y bosques de la cornisa cantábrica han florecido los gamones (Asphodelus albus), unas plantas muy característica por las varas largas, a veces de más de metro y medio de altas, donde se encuentran sus flores. Durante la floración de estas plantas se congregan en ellas gran cantidad de insectos y otros pequeños animales que acuden sobre todo a libar el néctar, pero también a comer sus hojas y flores e incluso a cazar a otros animales.


Las abejas y abejorros aprovechan los días de abundancia para hacer viajes continuos desde las flores hasta las colmenas, y en un momento llegué a contar más de 10 himenópteros de 4 especies ditintas en una misma espiga.

Zigaena trifolii

Las zigenas, que han aparecido a cientos por todos los prados, también se detienen en las flores del gamón para repostar. Y como ellas decenas de especies de mariposas que acuden atraídas por el olor y el llamativo color de sus pétalos.


Los escarabajos sanjuaneros (Melolontha melolontha) también aparecen por las espigas, pero ellos tienen una especial predilección por las flores secas y marchitas. Está claro que incluso dentro de una sóla planta hay especialistas que se aprovechan de cada una de sus partes, intentando evitar la competencia con otras especies.

Scatophaga stercoraria

Algunos insectos, como la mosca Scatophaga stercoraria, que como su nombre científico deja entrever, tiene predilección por los montones de estiercol, cambian su dieta temporalmente para alimentarse de néctar. En pocos días se habrá terminado el maná y volverá a sus escatológicas costumbres.

Araña (Thomisidae) atrapando a una abeja (Apis mellifera)

Pero como si se tratara de las sabanas del Serengueti, las concentraciones de herbívoros y polinizadores también atraen a los depredadores. Las arañas cangrejo (Familia Thomisidae) tiene colores crípticos que se confunden con el medio donde se encuentran. Aprovechándose de su "invisibilidad" esperan pacientemente a que un insecto descuidado se acerque para lanzar un rápido ataque y atraparlo. Una vez agarrado, la araña le inoculará su veneno y comenzará a digerirlo.


Dentro de unos pocos días, las flores del gamón se habrán marchitado y la planta comenzará a secarse. Este pequeño microhábitat temporal desaparecerá y la pequeña comunidad que se había asentado en sus flores y hojas se marchará para buscar un nuevo sitio.

NOTA: como siempre, haced click en las fotos para verlas a mayor tamaño

martes, 26 de abril de 2011

Sílbame


El domingo pasado me encontré a esta pequeñaja sobre una piedra cubierta de musgo. No medía mas de un palmo y parecía tan indefensa que cualquier pájaro que hubiera pasado por allí se la podía haber merendado de un picotazo. Al verla era dificil imaginar que en pocos años podría alcanzar casi dos metros de longitud, aunque no lo tendrá nada fácil, porque a los depredadores naturales como zorros y aves rapaces, se les unirán palos y azadas en manos de personas que aun piensan que son el demonio reencarnado, la maldad en estado puro.


Las culebras de agua, como esta culebra de collar (Natrix natrix), son reptiles totalmente inofensivos, que lo único que hacen para asustar a sus enemigos es fingir que atacan y luego hacerse las muertas. Y si se las molesta demasiado literalmente se cagan de miedo liberando una sustancia pestilente para intentar auyentarlos. Ni muerden ni tienen veneno.


A mi personalmente me parecen unos animales preciosssssosss, con essssos ojossss redondossss y grandessss y esa boca que parece que va a empezar a ssssilbar de un momento a otro.

"Trusssst in me, Jussssst in me
Sssshut you eyesss, and trusssst in me
You can ssssleep, Ssssafe, and sssound
Knowing I am around, Drift into ssssilent sssslumber
Sssail on a sssilver missst, ssslowly but surely your sssenses will cease, to reasssist
Trusssst in me, jusssst in me
"

(Kaa a Mowgli en "El libro de la selva", Rudyard Kipling, 1894)

NOTA: haced click en las fotos para verlas a mayor tamaño

domingo, 24 de abril de 2011

Tan sólo una gota de agua


Esta semana santa vino pasada por agua y yo que me había marchado a Nuveana cargado con todos los bártulos ya pensé que me los iba a traer de vuelta sin sacarlos de la mochila. Pero uno de las mañanas en la que todo amaneció empapado por la lluvia y el rocío, me acordé de una noche que pasé con Alfredo intentando fotografiar gotas de condensación y decidí intentarlo de nuevo, pero esta vez a la luz del día.


Una gota de agua es un pequeño volumen de líquido que está delimitado por superficies que se encuentran encadenadas entre sí. La gota se forma debido a la existencia de la tensión superficial, que es el efecto físico que tiene lugar cuando la energía de atracción de las moléculas "endurece" la capa exterior y superficial del agua en reposo. Debido a que una esfera presenta la mínima área para un volumen dado, por acción de la tensión superficial, la tendencia de una pequeña porción de líquido es la que la lleva a formar una esfera.



En el caso de que la gota se deposite sobre una superficie plana se creará un menisco en el borde de contacto, cuya forma dependerá de la naturaleza del líquido.


Pero además de estas características comunes con el resto de gotas de todos los fluidos, una gota de agua también funciona como una lente, de forma que las imágenes que hay detrás de ella aparecen invertidas y con la deformación propia de su forma esférica. De esa forma, nos dará la impresión de que hay un pequeño mundo en miniatura encerrado dentro de la gota.



Algunas de las gotas que fotografié esa mañana no medían mas de 1mm de diámetro y se mantenían pegadas a los diminutos pelillos de las hojas sin caer, algunas estaban aplastadas y otras eran completamente esféricas.


Incluso las telas de araña tenían sus gotitas, y dentro de cada una de ellas, por pequeña que fuera, se escondía ese pequeño mundo en miniatura vuelto del revés.


Me parece que ya no me voy a aburrir en los días de lluvia, todo es cuestión de escala y si no nos gusta lo que vemos solo tenemos que mirar dentro de una gota de agua.

NOTA: Haced click en las fotos si las queréis ver a mayor tamaño

miércoles, 20 de abril de 2011

Colores

Hay ocasiones en las que no hace falta decir nada, solo hay que sentarse, mirar alrededor y dejar volar la imaginación.






 Todas estas imágenes fueron tomadas el fin de semana pasado en Monfragüe y en los campos de Zamora.

martes, 19 de abril de 2011

¿Buitres asesinos?


El pasado fin de semana nos escapamos a Monfragüe como ya hicimos el año pasado en compañía de nuestros amigos de Ardeidas. Uno de los motivos del viaje era el de disfrutar de la rica población de rapaces de este Parque Nacional, entre las que destacan las aves carroñeras y por su abundancia los Buitres leonados (Gyps fulvus), con unas 800 parejas censadas en 2008.

Los buitres, a pesar de ser unas de las especies mas beneficiosas de nuestra fauna, ya que son los encargados de eliminar rápidamente los cadáveres de los grandes animales, nunca han tenido buena prensa entre la población. La gente los considera aves desagradables y feas, y en los últimos años los han empezado a acusar de matar el ganado, comprobándose posteriormenente que la mayoría de estos ataques eran falsos, ya que los buitres se concentraban para alimentarse de animales muertos o de restos de los partos de vacas y ovejas. Es posible que los buitres puedan matar a un animal herido o enfermo, pero sería muy improbable que mataran a un animal sano.


Nidos de buitres con pollos en el Salto del Gitano (Monfragüe). Sólo en este acantilado crían unas 100 parejas de esta especie y nunca se ha registrado un ataque a pesar de las miles de personas que lo visitan.

Pero hoy mismo me han pasado un artículo de un periódico que me ha dejado completamente alucinado, una mujer aseguraba que estuvo a punto de morir devorada por un grupo de buitres, y que se salvó gracias a que un coche apareció y los espantó. En el artículo en cuestión, describe como estas aves la rodearon mientras paseaba por las afueras del pueblo y que se acercaban a ellas con intenciones nada amistosas.

Seguramente la mujer se haya asustada al observar a estas aves de gran tamaño,  a las que probablemente hubiera sorprendido después de alimentarse sin que pudieran levantar el vuelo. Los buitres son capaces de comer varios kilos de carne de una sentada y después necesitan varias horas hasta que pueden levantar el vuelo, por lo que no es raro encontrarse con un grupo de estas aves moviéndose tórpemente si las sorprendemos en ese momento. A mi me ha pasado varias veces.

Buitre reposando después de haber comido, a escasos metros de mi y sin ninguna intención de devorarme

Pero lo sorprendente no es la reacción de esta mujer, que por desconocimiento haya podido pensar que los buitres la iban a atacar cuando seguramente estarían esperando a hacer la digestión. Lo sorprendente es que la Guardia Civil haya comentado tras recibir la denuncia que "iban a vigilar la zona" y que las autoridades de varias comunidades autónomas se estén planteando empezar a controlar la población de buitres. Como siempre ocurre, la palabra "control" es un eufemismo para no emplear la verdadera palabra: matar, descastar o eliminar.

Resulta paradójico que una de las especies mas beneficiosas de nuestra avifauna, una especie que esta siendo diezmada por el uso de venenos, vaya a empezar a ser "controlada" por unas acusaciones infundadas. En vez de informar, educar y explicar la situación, es más cómodo y rápido pegar cuatro tiros y zanjar el problema. Mientras esto ocurre, las autoridades ocultan los casos de envenenamiento y de furtivismo, y los responsables de estas barbaridades quedan impunes para seguir cometiéndolas.

Una vez mas, la ignorancia se abre camino y no me extrañaría nada que ya que estamos en periodo electoral, los responsables políticos intenten cosechar otro puñadito de votos autorizando un control de estas aves asesinas. Ya lo hicieron con los cormoranes y con los lobos y durante décadas también con zorros, martas, ginetas, aves rapaces y demás "alimañas", así que están bien entrenados.

Como colofón os copio literalmente un comentario de un lector del periódico que publica ese artículo: "La solucion, escopeta al hombro y punto pelota, que viene un verde o un oenejero, pues dos pajaros de un tiro y dejemonos de tanta tonteria y proteccion..."

sábado, 16 de abril de 2011

Una Ranita de San Antonio diferente

Hyla arborea con axantismo

Hace una semana quedé con Héctor Ruiz y con Tino en El Puertu (Sumieo) para ver los pechiazules (Lucinia svecica) que crían por la zona. Cuando estabamos viéndolos entre las escobas, escuchamos como empezaban a cantar las Ranitas de San Antonio (Hyla arborea) en una charca próxima. Todos conocemos a estas ranas por su color verde intenso y su aspecto que recuerda a las ranas arborícolas tropicales.

Hyla arborea de coloración típica 

Pero entre todas las ranas de aspecto normal que había en la charca, encontramos una con una coloración diferente, ya que en vez de ser verde era de color gris. Esta variedad de color es muy rara y al menos yo es la primera vez que la veo en esta especie. El color verde de las ranitas de San Antonio se debe a la combinación de varias células pigmentarias: xantóforos (responsables del color amarillo), iridóforos (responsables del color azul) y melanóforos (responsables de colores marrones o negros). Cuando todas estas células están presentes, que es lo mas normal, la rana tiene el color verde característico de la especie.


Cuando el pigmento amarillo no está presente, el resultado son ranas de color azul o grisaceo. Las variedades azules son mas frecuentes en Hyla meridionalis. Este fenómeno recibe el nombre de Axantismo y es el resultado de una mutación genética recesiva que hace que no se formen los xantóforos.

martes, 12 de abril de 2011

Amores batracios


Con la llegada de la primavera y la subida de las temperaturas, muchas especies de anfibios han comenzado a reproducirse. Las ranas bermejas (Rana temporaria) de zonas bajas ya lo hicieron en otoño y ahora les toca el turno a las poblaciones de zonas altas que se habían pasado el invierno bajo la nieve. Otras especies con una fenología menos diferenciada, como los Sapos comunes (Bufo bufo) aprovecharán estos días para hacer sus puestas. Sólo hace falta visitar los blogs de los amigos (1, 2) para darse cuenta de que estas últimas semanas la reproducción de esta especie se encuentra en pleno apogeo por toda nuestra geografía..


Los sapos son muy filopátricos, o sea, que tienen una especial querencia a reproducirse en el lugar donde nacieron y repiten año tras año en los mismos sitios. Esto hace que en determinadas zonas se produzcan grandes concentraciones de reproductores durante unas cuantas semanas al año en la que los machos se reunen esperando a que las hembras maduras se acerquen a desovar.


Los machos se arman de paciencia y compiten con otros machos por los mejores lugares y una vez que aparecen las hembras se darán patadas y manotazos para conseguir agarrarse a ellas. La mayoría no lo conseguirán y sólo aquellos mas fuertes y capaces de desplazar a sus rivales se aparearán con éxito. Debido a esto, cuando estudiamos la dinámica y la genética de una población es más importante el concepto de "población efectiva" que es el número de individuos que se reproducen y que por tanto pasan sus genes a la siguiente generación, que el de población total, que incluye a la fracción que no se reproduce.



El amplexus tiene por objeto estimular a la hembra para que realice la puesta. El macho la aprieta con sus patas anteriores y cuando ella está lista arquéa su cuerpo y comienza a expulsar los huevos. El macho los fecundará a medida que vayan saliendo y con sus patas traseras agarrará el cordón que sale de su cloaca y tirará de él ayudando de esta forma a su expulsión (haced click en las fotos para verlo con mas detalle). Cuando termine de desovar, un cordón transparente relleno de pequeños huevos negros, que puede alcanzar varios metros de longitud, acabará enredado entre las ramas y las piedrecillas ocupando gran parte de la charca o el arroyo.


Pero no todos los sapos llegarán a sus charcas, desgraciadamente cientos de ellos moriran aplastados por los coches ya que gran parte de las zonas de reproducción se encuentran al borde de caminos y carreteras. Ayer por la noche, en la localidad de Tuiza, en un tramo de unos 30 metros encontramos unos 15 sapos recientemente atropellados. Sólo haría falta una mínima inversión por parte de la administración para evitarlo, y por supuesto sólo un poco de cuidado y respeto por parte de los conductores, pero me temo que al menos en nuestro país eso es mucho pedir.

NOTA: Esta investigación está financiada por un proyecto financiado por el Organismo Autónomo de Parques Nacionales (REF: MMAMRM-08-38/2008)

domingo, 10 de abril de 2011

La noche del cazador

Araña (Familia Tetraghnathidae) inoculando su veneno en una presa poco habitual, una lombriz de tierra.

Cuando oscurece, muchos depredadores que habían permanecído ocultos durante el día abandonan sus escondites y salen a buscar alimento. Cuando pensamos en esos animales, solemos olvidarnos de que bajo nuestros pies se encuentran los depredadores más sofisticados de nuestra fauna, que en la mayoría de las ocasiones no suelen medir mas de dos o tres centímetros de longitud. Algunos fabrican trampas para capturar a sus presas, otros disponen de venenos capaces de matar instantáneamente, otros inoculan sustancias paralizantes y enzimas que digieren los tejidos blandos que luego sorben una vez que se han licuado completamente. Algunos persiguen a otros animales que les pueden doblar en tamaño matándolos con sus mandíbulas especializadas.

Amaerobius sp. en su madriguera esperando a su próxima víctima

Las arañas son  todas depredadoras y representan perfectamente a este gremio de cazadores, la mayoría son cazadoras solitarias que paralizan a sus presas inyectándoles veneno con sus quelíceros (haced click en la primera foto para verlo en detalle). Todas las arañas poseen unas glándulas productoras de seda que es utilizada por algunas especies para producir complejas redes y también para inmovilizar a las presas una vez que caen en la trampa. Otras en cambio, como los Licósidos, fabrican madrigueras y trampas que usan para cazar al acecho. Aunque muchas son diurnas, la mayoría cazan de noche.

Escolopendra corriendo por una pared vertical

Otras especies de cazadores nocturnos son las escolopendras. Estos miriápodos, al igual que las arañas, utilizan potentes venenos para matar a sus víctimas. En el caso de las escolopendras persiguen a otros artrópodos y los capturan con el último par de patas que dispone de unas uñas modificadas para la caza. Posteriormente, mediante unos apéndices denominados forcículas, les inyectan una solución que contiene una combinación de veneno paralizante y enzimas digestivos que al igual que en el caso de las arañas comienzan la digestión extracorporea.

Carabus (Chrysotribax) rutilans

Pero no todos los artrópodos cazadores son venenosos, muchos son cazadores más "tradicionales" que provistos de fuertes mandíbulas capturan a otros invertebrados para posteriormente devorarlos. Entre estos cazadores, unos de los más especializados son los carábidos, que son unos insectos coleópteros que en ocasiones tienen colores metálicos muy llamativos.

jueves, 7 de abril de 2011

La selección sexual en las aves: adornando el nido


Han pasado solo unas pocas semanas desde que los millones de estorninos que acudían todas las noches al dormidero del centro de Asturies se hayan marchado a sus lugares de cría. La mayoría de los estorninos pintos (Sturnus vulgaris) que pasaron el invierno entre nosotros han emigrado hacia el norte de Europa, pero muchos se han quedado para reproducirse. Hace pocos años esta especie no nidificaba en Asturies pero en poco tiempo ha empezado a críar y ahora es una especie abundante, sobre todo en las zonas de campiña.

Desde hace varias semanas los machos de estornino han comenzado a buscar un lugar apropiado para hacer el nido, y desde allí han empezado a cantar y a exhibirse para atraer a las hembras. Algunos lo consiguen en poco tiempo mientras que otros pueden pasarse días y días sin que ninguna hembra se fije en ellos. En la elección por parte de la hembra influye tanto el canto y el plumaje (indicadores honestos de la calidad genética del macho) como el lugar elegido para hacer el nido. Y no sólo eso, sino que las hembras visitan los agujeros elegidos como nidos potenciales y se fijan en su contenido para evaluar la calidad del macho.

Hojas verdes añadidas por un macho de estornino antes de la puesta

Según han comprobado los investigadores Vicente Polo y Pablo Veiga, los machos de estorninos introducen en el nido hojas verdes como indicadores de calidad. Las hojas son reemplazadas cuando empiezan a secarse y contrariamente a lo que se pensaba no se introducen como material de construcción sino como adorno. Un macho que acarreé muchas hojas y mantenga la casa bien adornada será un buen macho.



Una vez que la hembra se ha convencido de que el macho será el mejor padre para sus hijos empezarán a construir el nido. Pero contrariamente a lo que se cree, la selección sexual no sólo tiene lugar en los machos que quieren atraer a las hembras, sino que en algunas especies las hembras también deben demostrar que ellas también tienen suficiente calidad genética para que el macho gaste sus energías en criar a sus hijos. Y en el caso de los estorninos tienen varias maneras de demostrarlo durante distintas fases de la cría.

Plumas de anátidas introducidas por una hembra de estornino

Como hemos visto, los machos introducen hojas verdes para atraer a las hembras. Pues las hembras responden ante este estímulo introduciendo plumas vistosas como indicadores de su propia calidad genética. Al igual que ocurría con las hojas verdes, primero se pensó que las plumas eran introducidas por las hembras como material para acolchar el nido o hacerlo mas confortable, pero los mismos investigadores demostraron en otro artículo publicado en la revista Journal of Animal Ecology en 2006, que las plumas, al igual que las hojas verdes en los machos, eran introducidas como ornamento durante la incubación.

Figura: Número de plumas añadidas diariamente por las hembras de estornino entre los dos días antes de iniciar la puesta hasta dos días después de la eclosión. Los círculos negros son los nidos en los que se añadieron experimentalmente hojas verdes. Las flechas indican el inicio de la incubación y la eclosión del primer huevo (Polo y Veiga, 2006).

Y aun mas, ellos comprobaron que había una relación directa entre la cantidad de hojas verdes introducidas por los machos y el número de plumas que colocaba la hembra. Para demostrarlo hicieron un experimento en el que en unas cajas nido introdujeron hojas extra y en otras las quitaron. En aquellas cajas donde se habían añadido hojas para dar la apariencia de que el macho propietario era mas atractivo y potencialmente un buen padre, las hembras acarrearon mas cantidad de plumas para demostrarle a él que ellas también serían buenas madres y que merecía la pena que trabajara duro para sacar adelante a sus hijos en común. La conclusión era que tanto la capacidad de decorar con hojas verdes por parte de los machos y de plumas por parte de las hembras podían ser vistas como dos comportamientos de señalización implicados en el cortejo mutuo y en la señalización del estatus social.

Pero una vez realizada la puesta y comenzada la incubación, la hembra seguirá señalizando su calidad gracias al color de los huevos. El color será un reflejo de la condición física de la hembra, y como ya vimos en otro artículo en este mismo blog, los machos cebarán con mas intensidad y frecuencia a los pollos procedentes de huevos mas oscuros, que también eran indicadores de una mejor condición.


Referencias

Polo, V., & Veiga, J. (2006). Nest ornamentation by female spotless starlings in response to a male display: an experimental study Journal of Animal Ecology, 75 (4), 942-947 DOI: 10.1111/j.1365-2656.2006.01103.x

Veiga, J., Polo, V., & Vinuela, J. (2006). Nest Green Plants as a Male Status Signal and Courtship Display in the Spotless Starling Ethology, 112 (2), 196-204 DOI: 10.1111/j.1439-0310.2006.01148.x

martes, 5 de abril de 2011

La noche del caracol


Aunque todos tenemos guardada en la memoria la cantinela del caracol que saca los cuernos al sol, lo cierto es que la mayoría de estos animales tienen hábitos nocturnos y crepusculares, y el sol mas que llenarles de alegría los reseca y los mata. Debido a esto evitan las horas centrales del día y prefieren los días lluviosos y nublados y la oscuridad a la luz.


En las noches húmedas y cálidas, poco después de que se ponga el sol, los caracoles empiecen a asomar los cuernos. Los hay de todas las formas y colores, muchos de ellos mas pequeños que una uña de un meñique, otros grandes como un dedo pulgar. Todos salen salen de sus refugios diurnos para buscar alimento y también para reproducirse.

Cepaea nemoralis

Hace unos días, mientras andaba detrás de las salamandras rabilargas me fijé por casualidad en la gran cantidad de caracoles que compartían el talud con ellas. Me sorprendió la gran variedad de especies que pude ver en un espacio tan pequeño y me sorprendió lo bonitos que eran.


Algunos tenían la concha lisa, otros con rayas, otros eran color dorado brillante, algunos de tenían la concha multicolor y otros tenían manchas dispersas por toda su superficie. Los había con conchas aplanadas mientras que otros las tenían redondeadas y globulosas. Los había que tenían la superficie intacta mientras que otros la tenían rota y escachada, quizás por alguna caída o por el picotazo de un pájaro.

Caracol de Quimper (Elona quimperana)

Mientras los miraba y les hacía fotos se me pasaron las horas sin darme cuenta y seguro que con un poco mas de tiempo hubiera encontrado muchos mas. Como ya comenté varias veces, solo hace falta darse una vuelta y fijarse un poco para darnos cuenta de lo poco que sabemos y de lo mucho que nos queda por aprender.

Y como evidentemente me queda muchísimo por aprender, os agradecería a los que sabeis mucho mas que yo que me echéis una mano con la identificación, a ver cuantas especies sacamos entre todos.

sábado, 2 de abril de 2011

Salamandras rabilargas en la noche de Casu


El pasado jueves, mientras recorríamos por la noche una carretera en Belerda (Casu, Asturies), encontramos nada menos que siete Salamandras rabilargas (Chioglossa lusitanica) que salían a alimentarse por el talud. Algunas caminaban lentamente entre el musgo mientras que otras aun permanecían escondidas en las cuevas que les servían de refugio.

Este pequeño urodelo es uno de los anfibios mas singulares de nuestra herpetofauna y un endemismo ibérico cuya distribución se restringe a Galicia, parte de Asturies y el norte de Portugal.


Las salamandras rabilargas prefieren sustratos silíceos, estando prácticamente ausentes en zonas de caliza. También necesitan una elevada humedad por lo que suelen aparecer en la proximidad de arroyos sobre suelos rocosos o arenoso y cubiertos de musgo.


Estas salamandras, como indica su nombre común, tienen una cola de una longitud desproporcionada respecto a su cuerpo, y al igual que ocurre con las lagartijas, tienen la capacidad de desprenderse de ella si un depredador las acosa, pudiendo regenerarla posteriormente. De esta forma, el depredador se quedará entretenido con la cola que seguirá moviéndose durante unos segundos mientras que la salamandra se escapa salvando la vida.